Parajes |
|
La Villa Real de Navalcarnero, por su ubicación y por su tradición histórica, siempre ha estado muy ligada al medio natural. Durante quinientos años, el campo ha sido el principal medio de subsistencia de las familias de la localidad. Y tal vez por esa razón, no hemos perdido nunca nuestros vínculos de unión con la tierra. Los parajes que conforman Navalcarnero nos enseñan, que la naturaleza es sincera, contundente y directa. Actúa como la gran madre que no da explicaciones porque nunca las pide y quiere, que por encima de todo que la vida continúe. Y, así, es hermoso contemplar como renace día a día el Río Guadarrama, la Mina del Mingo, la Fuente de Valdeyesos, los Pozos Viejos, etc. Por este motivo , Navalcarnero acoge gustoso a innumerables visitantes que vienen huyendo de las grandes urbes y que añoran la tranquilidad del paisaje rural. |
Parajes de Navalcarnero
Parajes de Navalcarnero (Galería Fotográfica)
Paisaje Vegetal
Paisaje Vegetal
|
El paisaje vegetal está cubierto en su totalidad por parcelas de cultivos herbáceos de secano (cereales y leguminosas), herbáceos de regadío (hortícolas) y leñosos (viñedo). Los principales cultivos son los cereales como el trigo, la cebada y la avena, generalmente empleados para transformación en piensos para el ganado. Le siguen en importancia las leguminosas grano: veza y garbanzo. Este último de gran prestigio en la comarca y en la región por la gran calidad que presenta la variedad “madrileño”. Entre los cultivos herbáceos de regadío destacan los hortícolas, que presentan tres tipos de explotaciones: al aire libre, bajo plástico y mixtos. Las alternativas al aire libre están compuestas de cultivos como la lechuga, acelga, coliflor, repollo, etc. Destaca entre todos ellos la lechuga por su calidad. Respecto a los cultivos protegidos, merece la pena citar el pepino y el tomate, como principales y la judía verde. En invierno, como cultivos “de relleno” se instalan acelgas y espinacas. Entre los cultivos leñosos destaca el viñedo con unas 2.500 Has., Navalcarnero da nombre a una de las zonas vitícolas integradas en la denominación de origen “Vinos de Madrid”. También existe olivar muy diseminado y sin constituir plantaciones regulares. Otros aprovechamientos de no tanta importancia son los pastizales o terrenos poblados con especies herbáceos espontáneas, que no se labran y que son susceptibles de aprovechamiento mediante pastoreo por el ganado ovino. Existen también masa de matorral en donde están representadas las jaras, retamas, tomillos, carrascas de encina, etc. Por último se debe mencionar superficies arboladas con especies forestales como el pino piñonero y asociaciones de pino carrasco y encina. |
Ecosistema
Ecosistema
Dentro de los ecosistemas madrileños, la zona de Navalcarnero está integrada en los secanos y barbechos en arenales. Las especies herbáceas existentes, entre otras, son: amapolas, vallico, manzanilla, corregüela, cenizo, zurrón de pastor, lechetrezna, malva, verdolaga, cardillo, etc. Entre los hongos destaca la seta de cardo. Como especies arbóreas aparecen la vid, el olivo, la manta de encina, el encinar y la retama. Dentro del reino animal y entre los mamíferos se hallan la liebre, el ratón de campo y la comadreja. Entre las aves: el gorrión común, mochuelo, jilguero, sisón, alondra, avutarda, aguilucho cenizo, perdiz roja y cigüeña. Entre los insectos: la langosta, alacrán cebollero, grillo, cigarra, escarabajo pelotero, ciertas mariposas (catocala, zagris), etc. |
Dehesa de Mari Martin
Historia de un paraje: "La Dehesa de Mari Martín"
La historia de la dehesa de Mari Martín va íntimamente ligada a la historia de Navalcarnero. El Concejo local y el Cabildo segoviano afirmarán muchas veces ante la Corona que la puebla de Navalcarnero era imposible sin la posesión de la dehesa. Por ello, nuestra Villa Real luchará hasta lo imposible para mantenerla bajo la jurisdicción de sus alcaldes. Igualmente Navalcarnero batallará contra Segovia cuando ésta pretenda reducirla a pasto común con objeto de rebajar la tensión con los señores comarcanos, los cuales pleiteaban ante la Justicia Real para sustraer la dehesa a Navalcarnero. Esta continuada batalla jurídica mantenida contra los señores comarcanos tenía también otras manifestaciones de carácter más cotidiano, como era la defensa de sus límites contra los que pretendían invadirla para cortar leña y hacer otros aprovechamientos prohibidos. Para todas las villas cercanas era una tentación entrar con sus ganados a pastar en ella o a cortar leña en sus espesos encinares (50.000 encinas quedaban todavía en 1886) y los guardas puestos por el Concejo habían de emplearse a fondo para impedirlo. Se podría decir que cada rincón de la dehesa tiene su anécdota. Desde que en 1501 la ciudad de Segovia la amojonó para aprovechamiento privativo de Navalcarnero y nombró el primer guarda que la defendiera, un rosario continuo de apresamientos se suceden en cadena. En 1519 la escasez de madera en Móstoles (jurisdicción de la Mitra toledana) era un mal endémico. Ya se habían enfrentado algunos mostoleños a los guardas de Segovia en otras ocasiones. Pero en el momento que narramos se juntaron gran número de ellos, con muchas mulas y carreteras, para entrar en la dehesa de Mari Martín a cortar leña. Pretendiendo evitar ser prendidos por los guardas, además de formar numeroso grupo, iban ” a mano armada” , bien provistos de armas ofensivas y defensivas. Los guardas los detectaron, pero como nada podían hacer contra tanta gente armada corrieron a Navalcarnero para denunciar el hecho. Se tocó la campana de la iglesia a rebato y se reunió un gran gentío. Salieron los navalcarnereños “con armas, lanças e ballestas e espadas” y fueron al encuentro de los mostoleños. Se enfrentaron unos contra otros y hubo “muy gran ruydo “. Total, que los de Navalcarnero “descalabraron” a varios vecinos de Móstoles y a la inversa. Pero el enfrentamiento se inclinó en esta ocasión a favor de los navalcarnereños. Apresaron éstos a muchos vecinos de Móstoles, que trajeron presos a Navalcarnero, y les tomaron muchos “capotes e azadones e achas e otras armas que traían”. El resto huyeron como pudieron. No era la primera vez que estos enfrentamientos tenían lugar y el asunto esta enconado. Por lo que tuvieron que venir “hombres honrados de Móstoles” a pedir al Concejo que pusiese en libertad a los presos, que les devolvieran las “las prendas” y que todos “fuesen buenos amigos”. Se desconoce cómo se resolvió el asunto por no haber hallado el proceso. Era costumbre que los alcaldes de Navalcarnero ordenaran una información, formarán un pequeño proceso y luego impusieran multas que habían de pagarse antes de recobrar la libertad o rescatar las prendas. Seguro que así se hizo, pero no cabe duda que la intervención en este caso de “los hombres honrados de Móstoles” suavizaría las penas. |
Señalización de Parajes
Señalización de parajes
La protección del medio ambiente es fundamental para conseguir una mayor calidad de vida de los ciudadanos. Para proteger primero es necesario conocer y valorar todos nuestros recursos naturales y culturales. El Ayuntamiento de Navalcarnero entre sus actuaciones y con el en el objetivo de conseguir una calidad ambiental tanto urbana como natural ha procedido a la señalización de los parajes y caminos de nuestro municipio.
|